Tanto la empresa The ART Company como la marca ART nacen en 1995 con una vocación deliberadamente juvenil, alegre, incluso despreocupada. El nacimiento de la marca viene acompañado de un auténtico éxito comercial gracias a una colección de botas de montaña disruptivas y coloristas que generan un movimiento singular entre la gente joven e inconformista del momento.

Aunque la marca ART nace en 1995, la experiencia en el mundo de la fabricación de calzado de calidad se remonta a más de treinta años antes de su nacimiento. Su fuerte tradición zapatera, unida a sus valores basados en el esfuerzo, la calidad y la innovación, han construido una empresa sólida, capaz de reinventarse y adaptarse a los tiempos.